No es un misterio que la minería está cambiando, hace ya 10 años que el sector está sintiendo una fuerte transformación tecnológica y digital, donde la incorporación de tecnologías, el acceso a información y datos, ha permitido optimizar la producción, reducir costos, aumentar la eficiencia y mejorar la seguridad. Una transición que además involucra la automatización y tele-operación de las operaciones físicas.
Según Pedro Damjanic, Vicepresidente de Minería de Finning Sudamérica, la autonomía y robotización son un salto tecnológico dramático para la minería, el más relevante de los últimos 100 años y Finning se está preparando para esto.
La compañía está trabajando en colaboración con Caterpillar y con las mineras tanto nacionales como internacionales. “También estamos aprovechando la experiencia de Finning en Canadá, donde ya tenemos incorporados procesos de autonomía en el portfolio de negocios”, ejemplifica.
En este contexto, revela que por primera vez tendrán un contrato en Chile en el cual se incluyen camiones autónomos. “Y el año pasado tuvimos unas pruebas muy exitosas con Codelco en minería subterránea con equipos semiautónomos”, añade.
Productividad al alza, más y mejor minería
“Incorporar sistemas de autonomía ayuda a lograr mejoras de productividad de hasta un 30%. En vez de trabajar 16 horas al día, se puede llegar hasta 22 horas, con lo cual se logra una ganancia por el efecto físico de las horas. El equipo no para y está siempre actuando a su máxima capacidad de diseño tanto en velocidad como en carguío”, destaca.
Asimismo, explica que con la tecnología que están logrando, “será posible tener caminos más angostos en la mina, y eso significa que los ángulos de talud y el diseño de la mina cambian y que los costos sean significativamente menores”. Y agrega: “Hoy nuestras flotas están en las faenas entregando un costo por tonelada más bajo y en forma más segura a nuestros clientes, y eso les está permitiendo recuperar más y mejor mineral, reducir su cantidad de equipos, bajar su nivel de inversiones y, por otro lado, lograr una mayor rentabilidad y eficiencia de sus procesos”.
En este punto, el ejecutivo se detiene a analizar el camión eléctrico Cat 794 AC, que exhibieron en la reciente Exponor 2019: “Este 794 AC de 305 toneladas, Diésel-eléctrico, tiene la vanguardia en tecnología y es muy fácil de mantener y operar. Ofrece mucha comodidad para el operador y tiene todas las capacidades para ser incorporado a un sistema autónomo”.
Finalmente advierte que en el escenario de baja en las leyes minerales las nuevas tecnologías están ayudando a seguir siendo competitivos y que haya más minería en el largo plazo: “El 30% de mayor productividad que se logra, también se transforma en costos más bajos, sin considerar variables como nuevos diseños de mina específicos para autonomía, que son cifras enormes de ahorro con respecto al modo tradicional. Sin duda, la consecuencia en el largo plazo es de más seguridad, más y mejor minería”.